miércoles, 20 de junio de 2012

No pagar su deuda-Rescatar a los trabajadores, no a los bancos


La lucha de los trabajadores del sector minero continua, después del éxito de la Huelga General 18 de junio. En las últimas semanas, áreas enteras de Asturias y León se han convertido en campos de batalla diaria entre 
los mineros y sus familias con las fuerzas de las diferentes policías antidisturbios.En relación al conflicto minero, es de   una hipocresía cínica hablar sobre “el despilfarro” de las subvenciones mineras (poco más de 300 millones de euros al año) cuando actualmente está comprometida la propia quiebra del conjunto del Estado español a la hora de asegurar la viabilidad y el funcionamiento de la banca de los capitalistas.
No se debe permitir la pérdida de un solo puesto de trabajo ¡Un puesto de trabajo que se pierde hoy es un puesto de trabajo que no queda para mañana! Si se pretende cerrar la minería, que se dote de una industria viable a las cuencas mineras. Hay dinero de sobra para garantizar un futuro en las comarcas mineras, o cualquier otra industria que se pretenda cerrar.

En el último febrero, las rentas del capital (empresarios y banqueros) sobrepasaron por primera vez en los últimos 35 años a las rentas del trabajo (los asalariados y parados) en la distribución del conjunto de la renta española ¡Pero los ricos no invierten su dinero para crear industria competitiva o empleo! Al mismo tiempo, decenas de miles de millones de euros han salido del país, tan solo el mes pasado, de capital extranjero sí, 
pero también ¡De los capitalistas españoles que tantos sacrificios nos piden!

Hace falta una alternativa de lucha  Ante todo lo que nos estamos jugando, una victoria de los mineros daría un impulso enorme al movimiento general contra la austeridad y los recortes. Ante el bloqueo informativo de los medios de comunicación sobre la lucha de los mineros, los sindicatos e Izquierda Unida deben organizar una campaña nacional de solidaridad con actos públicos, colectas en los centros de trabajo, giras de representantes de los mineros, etc.

Pero hay más sectores que se han movilizado en los últimos días, aparte de los mineros, empezando por los trabajadores de astilleros o los de toda la empresa pública. La unificación de todos estos sectores en una huelga sectorial en todo el Estado debe ser la base con la cual relanzar una movilización generalizada de la clase trabajadora cuando se anuncia la dilapidación de nuestras conquistas sociales para tapar el “agujero negro” que han creado los bancos.

El proceso de la Huelga General del 29 de marzo sirvió para desgastar fuertemente al Gobierno del PP. Pero, inmediatamente después, los máximos dirigentes de UGT y CCOO respondieron con una estrategia que, en los hechos, dividió el proceso de luchas y dejó soltar una gran parte del vapor que se había acumulado en febrero y marzo. En las últimas semanas, los máximos dirigentes de UGT y CCOO, Toxo y Méndez, casi han estado desaparecidos en mitad de la más aguda crisis política vivida por este país en toda su historia reciente, cuando se está cuestionando por parte del Gobierno y los dirigentes de las administraciones públicas cualquier avance social conseguido por la clase trabajadora en los últimos 40 años.

La movilización de hoy, 20 de junio, puede servir para cambiar este estado de cosas.Debe haber un objetivo claro que debe pasar, en primer lugar, por demostrar a la inmensa mayoría de la sociedad cómo 
el actual Gobierno del PP no responde a  los intereses de la misma. Con una táctica adecuada, volviendo al camino que se dejó en febrero y marzo, el Gobierno de Mariano Rajoy (un Gobierno que está aplicando una política que no se atrevió a defender  antes de las elecciones) no será capaz de resistir la legislatura. 
Y esto es, en primer lugar, aquello por lo que debemos luchar ¡No debemos estar condenados a un sin vivir durante los tres años y medio próximos! Ya la experiencia de Grecia demostró que, en este período, incluso huelgas generales de 24 y 48 horas, de forma aislada entre sí, no pueden echar atrás los recortes y ataques del capital financiero y las grandes empresas. Hace falta una estrategia sostenida de movilización en la calle.

Qué programa defender.  Desde LUCHA DE CLASES creemos que si en Izquierda Unida  ofreciéramos una bandera de lucha limpia contra TODOS los recortes, de la misma manera que SYRIZA multiplicó por seis sus resultados electorales en un corto espacio de tiempo, IU se podría convertir en una clara referencia para los trabajadores.Ahora bien, en las actuales condiciones de crisis aguda capitalista, ahora más que nunca, la estrategia de las mejoras a través de las instituciones y el viejo programa de la socialdemocracia se demostraron que ya no sirven. La política en las instituciones tiene que supeditarse a la defensa intransigente en la calle de todas las conquistas sociales de la clase trabajadora.La práctica intervención de la economía española por parte de sus acreedores debe marcar un punto de inflexión en las organizaciones sindicales y en IU de cara a defender un programa claro que, hoy en día, dé respuestas concretas a los problemas más acuciantes que sufrimos.Ante el dinero que se está evadiendo en masa del país, no basta con que el Estado imponga controles inmediatos ante la fuga de capitales. Hay qué decidir quién controla esos capitales, quién 
los invierte y en qué: si van a la especulación con la Deuda española (como están haciendo ahora los principales bancos españoles) o sirven para ponerse al servicio de la inmensa mayoría y crear riqueza ante la necesidad acuciante que estamos sufriendo.Ante la subida sin pausa del desempleo; ante la falta de inversiones para generar empleo por parte de los empresarios, motivada por la sobreproducción existente; ante la tendencia a la insolvencia e incluso quiebra inminente de importantes industrias y bancos…, los capitalistas y sus representantes políticos no van a presentar alternativa alguna, salvo pagar las deudas usureras a costa de la riqueza real que creamos los trabajadores, para que ésta sea trasvasada a los banqueros, todo ello en defensa de las leyes y propiedades de la “economía de libre mercado”.Así, en vez de invertir en empleo, los capitalistas (a través de su Gobierno) no dudan en poner ahora otros 100.000 millones para los bancos: nosotros pedimos rescatar con estos 100.000 millones a los trabajadores, que estamos mucho más necesitados y ya hemos sufrido bastante.

Desde LUCHA DE CLASES pedimos:

· Cancelar inmediatamente el pago de los intereses de la Deuda Pública (segunda partida de los presupuestos del Estado): más de 30.000 millones de euros en el 2012. Hay que repudiar la Deuda Pública, con indemnización para los pequeños inversores solo en caso de necesidad comprobada.

· Eliminación de las contrarreformas laborales de los últimos años.

· Ningún cierre de empresa. Empresa que cierre, inmediatamente nacionalizada bajo control democrático de los trabajadores.

· El conjunto del sector bancario y financiero debe ser nacionalizado en un solo banco público, pero no para absorber pérdidas y a continuación privatizarlo de nuevo, como pretenden PSOE y PP con las cajas, sino para hacerse cargo de todos sus activos y utilizarlos en interés de la mayoría.

· Los bancos detentan una gran cantidad de viviendas vacías. Éstas deben ser nacionalizadas y utilizadas para crear un parque de viviendas sociales públicas, y alquilarlas por no más del 10% de los ingresos familiares. Los pagos de las hipotecas, (pasadas, presentes o futuras), también deben tener un tope de no más del 10% de los ingresos familiares y ser congelados en caso de desempleo: se debe garantizar así que la vivienda sea un derecho básico.

· Debe llevarse a cabo una investigación completa en el sistema bancario y en las empresas que presenten “suspensión de pagos”: apertura de los libros de cuenta para los trabajadores de las mismas, YA, a fin de descubrir adónde fueron los beneficios durante la burbuja inmobiliaria y llevar al banquillo a todos los involucrados en escándalos de corrupción, financiación ilegal de partidos políticos, etc, asociados con la burbuja especulativa. Dicha investigación debería ser realizada por representantes de las Plataformas de afectados por las hipotecas, los trabajadores del sector bancario y sus representantes sindicales. No podemos confiar en los políticos de partidos implicados en la corrupción para investigar casos de corrupción

· Ante la incapacidad e irresponsabilidad manifiestas demostradas por los grandes empresarios y banqueros, 
demandamos la nacionalización de los centros básicos de la industria y la economía, empezando por las empresas del IBEX-35, indemnizando a los pequeños ahorradores y accionistas en caso de necesidad comprobada. Solo así, controlando estos recursos a través de los trabajadores y de los representantes por 
ellos elegidos en las diferentes empresas, el Estado podrá acometer un plan democrático de producción para garantizar el bienestar de la mayoría: de esta manera se podría reducir la jornada laboral para repartir el empleo (sin disminución de salarios) y, al mismo tiempo, lanzar un ambicioso plan de inversiones y obras 
públicas que diera trabajo a la totalidad de los 5,6 millones de desempleados, asegurando así una mejor sanidad, pensiones y servicios sociales en general.

· Otra Europa es posible, una Europa que pase por defender a la inmensa mayoría de la población. No a la Europa de los ricos y banqueros. Ese sentimiento es el que prima en el pueblo griego, ese sentimiento también es el que ha derrotado a Sarkozy en Francia. Esa idea sí puede unir a la inmensa mayoría de la 
población actual de la UE. Por unos Estados Unidos Socialistas de Europa, la única solución para Europa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

;