viernes, 3 de agosto de 2012

Programa: Banca


Partimos del hecho de  que existen condiciones objetivas maduras para la revolución. La madurez del sistema productivo actual y la falta de opción para el consumo así lo atestiguan. Y no solo condiciones objetivas como las que hemos mencionado. Existen, igualmente, condiciones subjetivas que apoyan esta idea. La falta de una dirección coherente y decidida de la clase obrera debe hacer reflexionar al conjunto del proletariado, reflexión que deberá desembocar en una regeneración interna que cree las condiciones optimas para la aparición de una vanguardia capaz de liderar la lucha de clases.

Por otra parte, defendemos la idea de que la manifestación actual de crisis no es una providencia divina. La crisis que estamos viviendo y sufriendo no es mas que una manifestación más de las contradicciones intrínsecas del sistema capitalista que periódicamente se han venido sucediendo a lo largo de los últimos siglos. No hay reforma posible del sistema capitalista, superarlo es la  salida que a la clase obrera le compete tomar…la única salida posible.

Asimismo, somos conscientes de que la masa obrera actual dista mucho de ser la vanguardia proletaria que tome el control de los medios de producción y avance, de esta manera, hacia una sociedad socialista. Si algo ha logrado el capital ha sido sustraer del inconsciente colectivo la conciencia de clase y sustituirlo por un vacío conformista e inocuo para sus intereses. Es un hecho el que, hoy en día y exceptuando a la vanguardia, la conciencia del conjunto de la masa obrera va por detrás de los hechos. Esto hay que subvertirlo. Por ello consideramos imprescindible la conformación de un Programa de Transición con sus respectivas consignas transicionales. Un programa para elevar el nivel de conciencia y recoger las aspiraciones de las masas obreras, partiendo siempre de la experiencia de las mismas, en el que se establezca un mínimo y un máximo. Desde el punto de vista revolucionario, se exige partir del cuestionamiento mismo del sistema hacia el planteamiento, organización y proyección del movimiento obrero que lleve  a la práctica el comunismo.

En este contexto el tema de la Banca suscita gran interés y contiene alta relevancia de cara a la elaboración de nuestro Programa de Transición. A lo largo de las ultimas décadas hemos visto desvanecerse la idea de la incombustibilidad de la banca gracias a la sucesiva  desaparición de bancos privados: hemos visto como el negocio del dinero, valiéndose de los fondos propios y los depositados por los clientes, ha entrado en barrena llevándose por delante a la sociedad: hemos podido comprobar como se enriquecían los banqueros al prestar dinero con un interés elevadísimo a los estados después de haber recibido ese mismo dinero de una entidad formada por los propios estados como lo es el Banco Central Europeo….y todo ello sin llegar a ser un sector productivo que genere riqueza real sino siendo un administrador especulativo de la economía.  Por todo ello, nosotros exigimos:

1)   Nacionalización de los bancos y aseguradoras bajo el control y administración democrática de los trabajadores en un único  Banco. Las decisiones bancarias se deben tomar en interés de la mayoría de la sociedad. La compensación por los bancos y empresas nacionalizadas sólo se debe pagar en caso de necesidad comprobada a pequeños inversores. La nacionalización de los bancos es la única manera de garantizar los depósitos y ahorros de la gente corriente. No se reconocerá toda deuda pública que implique enriquecimiento privado.
2)   Control democrático de los bancos. Los consejos de administración deberían estar formados de la siguiente manera: un tercio elegido por los trabajadores del banco, un tercio elegido por los sindicatos para representar a los intereses de la clase obrera en su totalidad y un tercio por el gobierno como garante del interés de los depositarios.
3)   Implantación de un sistema de rotación en el consejo de administración y la opción de revocabilidad de los cargos así como la limitación de permanencia en los mismos
 4) Los salarios de todos los ejecutivos deberían limitarse al salario de un trabajador cualificado Prohibición inmediata de las bonificaciones desorbitadas así como exigencia de  devolución de las mismas. Si los banqueros no están dispuestos a cumplir unos términos razonables se les sustituirá por  licenciados cualificados, muchos de los cuales buscan empleo y están dispuestos a servir a la sociedad.
5)   Reducción inmediata de los tipos de interés, que deberían limitarse a los costos indispensables de las operaciones bancarias. Eliminación, por tanto, del interés lucrativo de los bancos. Disposición de crédito barato para aquellos que lo necesiten: pequeñas empresas y trabajadores para comprar casas, y no para los banqueros y capitalistas.
6)   Derecho a una vivienda, paralización inmediata de los remates y desahucios, reducción general de los alquileres y un programa masivo de construcción de viviendas sociales baratas y de calidad.

7)  Lucha contra el fraude de fiscal mediante un único sistema de contabilidad dependiente del Banco Estatal,  implantación de impuestos directos progresivos, IVA en función de la necesidad del producto, nacionalización de empresas,  imposición de impuestos a la Iglesia, rigurosidad en la administración de dinero publico vía subvenciones/ayudas, y persecución jurídico-política de la corrupción.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

;